A sólo 10 km de Luchon, en la carretera de Superbagnères, el Valle del Lys es el punto de partida de numerosos paseos pintorescos. El arroyo que lo atraviesa, el Lys, es un afluente del Pique.
Contrariamente a la creencia popular, el Valle del Lys no debe su nombre a las flores que lo adornan cada mes de junio. Su grafía real Batche dera Lit, Vallée de la Lit, significa Valle de la Avalancha.
Desde este suntuoso lugar, rodeado de altas montañas, se puede disfrutar de paseos de distintos niveles de dificultad.
Unos metros más allá del aparcamiento, la cascada de Enfer es una de las más bellas de los Pirineos. Más adelante, tras una hora de marcha, se llega a la sima de Enfer. Continuando, el Ru d’Enfer es un impresionante saliente excavado en la roca por las aguas. Los más aventureros pueden probar el barranquismo bajo la supervisión de un guía.
Los paseantes estarán encantados con los paseos hasta el Pré de l’Artigue. Los excursionistas más experimentados pueden recorrer los lagos (Lac Vert, Lac Bleu, Lac Charles y Lac Célinda).
El Valle del Lys es también el punto de partida de excursiones a las altas cumbres del Luchonnais. Es el caso, en particular, del Pic du Maupas (3109 m), que destaca tanto por sus vistas panorámicas como por las hermosas ascensiones que ofrece en sus caras sur, oeste y norte.
Por encima del Valle del Lys, en el macizo de Crabioules, se explotaban minas a principios del siglo XX. Al principio, el mineral (plomo, zinc y blenda) se clasificaba in situ y se bajaba a lomos de mulas. Más tarde se instaló un cable aéreo con vagonetas, lo que permitió una explotación más amplia. A continuación, el mineral se procesaba en la planta de lavado del valle, cuyas ruinas pueden verse hoy frente a la posada. La extracción cesó en 1914, ya que los costes de explotación eran demasiado elevados para ser rentables.
La influencia del hombre en el valle queda patente en la presencia de la central hidroeléctrica. El agua del Lac Bleu y del Lac du Portillon fluye por los túneles y la tubería forzada que se ven descender de la montaña, alimentando las turbinas. Con sus 1.419 metros, este conducto es el mayor de Francia. Un teleférico permitía acceder desde el fondo del valle hasta la parte superior del conducto, pero para reducir los costes de explotación y el impacto visual, se ha desmantelado. EDF realiza ahora los trabajos necesarios en helicóptero.
Practicar senderismo en la montaña, incluso a baja altitud, requiere un cierto conocimiento del entorno y un gran número de precauciones. Póngase en contacto con los profesionales y consulte las previsiones meteorológicas antes de salir. En invierno, las numerosas vías de avalancha sobre el Valle del Lys obligan a extremar la vigilancia.